La vuelta al mundo

Itinerario del viaje

Convertirse en Phileas Fogg a un precio low cost

Imitar al famoso personaje de Julio Verne y recorrer 25 países durante cuatro meses es la propuesta de TheTour, la agencia de viajes que oferta una vuelta al mundo desde 4.900 euros.

Alba G. Fernández-Pacheco Madrid

Actualizado Jueves, 13 de octubre de 2011 - 18:56h;

40 ciudades, 25 países, 106 días de viaje... Es la propuesta de TheTour, la primera agencia de viajes que ofrece un paquete para dar la vuelta al mundo a un precio low cost. El director y socio fundador de la touroperadora, Ignacio Fernández Palomar, define la iniciativa como «una experiencia con valor añadido», ya que incluye guías y animadores para que los viajeros lo pasen bien en todo momento. Además, TheTour organiza tres meeting points en cada continente: experiencias a través de las que se pretende que los turistas se relacionen con las personas autóctonas.
La idea surgió debido a la carencia de propuestas similares en el mercado, explica Fernández Palomar, que añade que «hasta ahora solamente existían dos opciones para dar la vuelta al mundo: o bien hacerlo como mochilero, o contratar un costoso paquete de lujo con bonitos hoteles». Con todo ello, la propuesta de TheTour de casi cuatro meses de viaje ronda los 5.000 euros sin incluír los vuelos intercontinentales, aunque la empresa propone adquirir el billete One World, que permite volar hasta 15 veces por todo el mundo desde aproximadamente 3.000 euros.
La compañía ha conseguido minimizar los costes del paquete negociando precios a gran escala y contratando únicamente «transporte low cost», evitando el avión, y utilizando, por ejemplo, autobuses-cama en Sudamérica, camionetas del desierto en África, o el Tuk-Tuk en Tailandia.

Un mes, un continente

Para todos los mortales que no dispongan de casi cuatro meses de vacaciones, TheTour ofrece paquetes continentales. Se trata de viajes que duran de 24 a 28 días según el continente que elijamos, y cuyo precio, sin incluir el vuelo, oscila entre los 990 y los 1.100 euros.
Ignacio Fernández reconoce que, a la hora de la verdad, el 90% de sus clientes demanda los paquetes mensuales, y la vuelta al mundo low cost «está sirviendo de campaña publicitaria a la compañía». Además, la touroperadora ha organizado un concurso en Facebook cuyo premio es una vuelta al mundo. Para participar, basta con subir una foto al perfil de TheTour con la cara que se te quedaría si ganases el viaje.

¡Agua de Vida!

¿WHISKY O WHISKEY O GÜISQUI? La verdad es que se ve escrito de las tres formas así que lo llamare como su traducción del gaélico agua de vida.
La entrada anterior fue sobre cerveza y esta sobre el whiskey, de modo que espero que no se me tome por un ubriaco (como dirian los italianos), yo unicamente hablo desde el conocimiento que puede tener un bebedor casual, pero el agua de vida  si es con hielos mejor que mezclado con cocacola. Y por favor no confundirlo con el Bourbon que eso es como decia un agente de policia irlandés ya retirado, eso es american shit, un tipo muy interesante.

Unos niño en la destilería de Jameson (Dublín)

 Los escoceses al final se han rendido a la evidencia, y aclaman el whiskey irlandes como más puro, puesto que esta destilado 3 veces a diferencia del escoces, este es el JAMESON, que tiene la destileria en el centro de la ciudad de Dublín, hace justo un mes que terminaron unas obras de reabilitación del edificio y se puede hacer una visita guiada por unos 15 euros.

The oldest distillery in the world

Además, en esa rivalidad con Escocia a ver quien tiene el mejor güisqui, hay que decir que la destilería más antigua del mundo se encuentra en Irlanda, bueno Irlanda del Norte, la marca de whisky más antigua es Bushmills.

A vuestra salud.

No sólo de Guinness vive Irlanda

Sí, existe otra cerveza famosa en Irlanda además de la Guinness, y no es negra ni es cerveza, es una ALE, y se llama Kilkenny. Aunque en honor a la verdad hay que decir que la Ale que hacen en Kilkenny es de los mismos dueños que la cerveza negra más famosa.
Las Ale son las cervezas de alta fermentación, vamos todo lo contrario a una lager, y por tanto de mayor graduación, son más típicas en Inglaterra, son las que salen a presión porque a penas tienen gas, y son buenísimas.


Kilkenny fue la capital de Irlanda cuando era parte de Gran Bretaña. Por eso hay un montón de castillos, iglesias y otras fortificaciones. Una compañera de trabajo en Dublín, era de esta ciudad y muchas veces nos hablaba de ella con el orgullo de decir que era la verdadera Irlanda, y no le faltaba razón por que es preciosa y se encuentra en el centro de la isla.

Myself in Kilkenny´s streets

 Se puede visitar y es muy bonito el castillo, perteneció a la familia Butler durante años, y que en los años 60 cuando se mudaron a Inglaterra vendieron el castillo que era practicamente unas ruinas a las gentes del pueblo por solo 50 libras. Se ha restaurado y hay visitas guiadas cada media hora (más del 50% de descuento con el carnet de estudiante).

Castillo de la familia Butler

 Es una ciudad muy bonita a pesar de estar atravesada por una carretera comarcal por la que hay mucho tráfico y es dificil el paseo, pero el castillo y las casitas merecen la pena. Hay un youth hostel en el que se se puede hacer noche por un módico precio.

Catedral de Kilkenny

No dejen de visitar la antigua capital de Irlanda.

La ciudad eterna

Roma, sí Roma one more time, y esta fue la 7ª vez. Pero Roma es una ciudad que no te cansas de ver, aunque veas las rocas del foro romano sin tener mucha idea de si ese arco es el de Constantino o el de Tito, o la columna de focas es esa que se ve o es la roca de la derecha... y esa roca es el templo de Remo. Además como ahora encima hay que pagar para entrar a verlo uno se queda sin saber que significado tienen las piedras que ve desde la terraza de la plaza de Romulo y Remo, no se si ese es el nombre.

De todas formas, y a pesar de ser un viaje prácticamente exclusivo para asistir a la beatificación de Juan Pablo II el grande, hubo tiempo de visitar incluso las catacumbas de San Calixto, esas que estan más bien lejos, salen autobuses desde la basílica de San Juan de Letrán.

De modo que otra cosa que te queda por ver son las heladerias (gelaterie) a continuación nombro tres o "cuacho" heladerias que merecen la pena:

Justo al lado del Panteón de Agripa se encuentra la Gelateria della Palma, merece la pena porque hay una centena de sabores distintos.

En una de las calles que sale de la Piazza Navona esta una heladería que se llama Quito (o algo parecido) la diferencia que marca son las cantidades... asombrosas.

Entre San Andreas de la Valle donde se celebran las misas del UNIV y el Piazza Navona esta una heladeria de la que desconozco el nombre pero te echan chocolate caliente sobre el helado que solidifica formando una costra chocolateada sobre tu helado.

Pero la verdad es que cualquiera de los gelati italiani merece la pena y siempre en cucurucho

Liebeslied

Wie soll ich meine Seele halten, daB
sie nicht an deine rührt?

Wie soll ich sie henheben über
dich zu andern Dingen?

Ach gerne möcht ich sie bei

irgendwas Verlorenem im Dunkel unter
bringen an einer fremden stillen Stelle,
die nicht weiterschwingt, wenn deine Tiefen schwingen.

Doch alles, was uns anrührt, dich und mich,
mimmt uns zusammen wie ein Bogebstrich,
dee aus zwei Saiten eine stimme zieht.

Auf welches Instrument sind wir gespannt?
Und welchen Spiler hat uns in der Hand?

O súBes Lied.

RAINER MARIA RILKE

CRUX PERFECTIONEM SANCTITATIS

El título no tiene nada que ver, es un punto de T. Kempis; y esta entrada tampoco tiene nada que ver con el tema del blog, pero es genial. Mi compañero de habitación, un brasileño con pasaporte italiano, lleva poniendome esta canción que dice que es Pazzesca, o esquizofrénica, pero que a mi me encanta, y llevamos semanas escuchandola. ¡Disfruta la fruta!

Oxford

Sí, sí, Oxford es una ciudad, que nadie se confunda. Yo esperaba ver un pueblito inglés con una catedral gótica y 2 o 3 college también góticos, y resulta que me encuentro una ciudad tan o más grande que Cork, un poquito menos que mi Pamplona natal.

Oxford es una ciudad maravillosa, era el típico domingo de primavera, igual el primero de la temporada porque esa noche adelantamos los relojes, yo me entere al despertarme al poner las noticias de la BeeBeeCee, y corriendo para abajo un poco asustado pensando que me iba a quedar sin desayuno. 

Lucía el sol, sí he dicho sol, que en Inglaterra no llueve tanto, y ahora con el cambio climático cada vez  menos. A Oxford llegué en autobús desde Hillingdon… ¿y eso qué es? Un pueblo que esta al noroeste de Londres y a algo más de media hora de Uxbridge, yo tarde algo más porque me perdí, anduve durante casi 2 horas entre unifamiliares inglesas, pase por seis fish & chips y 2 cementerios hasta que llegue a la estación de metro de Hillington, sí llega el metro, además la Piccadelly line; ¿por qué no fui en Tube? Porque me gusta andar. En Hillington cogí el autobús Oxford Tube por 14 libras (- 1 libra por carnE de estudiante), pero hay varios de estos autobuses lanzadera o shuttle bus, casi todos salen de Victoria station en Westmister.

Oxford merece la pena verlo; es algo más barato que Londres en los servicios (no me refiero a los toilettes) porque el tema turístico es carillo, te cuesta casi 2 pounds visitar cada college, y 7 libras por que un señor con peluca y culotte te enseñe uno de los castillos más antiguos de Inglaterra. Los parques universitarios son una maravilla, llenos de gente tomando el sol, jugando a cricket, haciendo footing o dando de comer a los cisnes, y es que la fauna de los parques ingleses es increíble, entre ardillas, patos y otras ave, yo en Liverpool he visto hasta zorros (en masculino) en España es algo impensable, tu dejas a 4 chavales españoles y un balón en un parque y acaban con todas las palomas en menos de 2 horas. 

Hay mucho inglés de libro, de esos de chaqueta de tweed, sombreo y bastón, muy posh, y también mucha iglesia gracias al que ahora es beato Cardenal Newman. Es una ciudad muy bonita, de ambiente universitario en un escenario medieval, podría ser la Salamanca inglesa.